29 de julio de 2010

TANGO TERAPIA

Como parte de un tratamiento cada vez más difundido, ha demostrado ser útil para combatir la ansiedad y la depresión.

Según los profesionales consultados, la tangoterapia es una técnica terapéutica catalizadora del desarrollo personal, un método de exploración de los recursos personales y un potenciador de las capacidades de cada persona, a través del uso de la metáfora diagnóstica para arribar a conclusiones y llevar a cabo la acción terapéutica. Es un lugar de intercambios humanos y de juego, de vínculos con sentido y trascendencia, dentro del marco de una vivencia estética y creativa singular.

Según el especialista, el cuerpo, en el baile de tango puede expresar las penas, las angustias, las alegrías, los miedos... El abrazo puede generar una sensación de protección y contención. El ser reconocido y pertenecer al grupo mejora la autoestima. "Es notable observar cómo algunos que llegan sin interés por sus cuidados personales, al poco tiempo se sienten bien, se arreglan y reanudan su vida social. Es justamente la pérdida de la autoestima uno de los síntomas capitales de la depresión."

Bailar tango produce múltiples beneficios: ayuda a aliviar y a disminuir los síntomas de la ansiedad y la depresión; mejora el estado de humor; aumenta el entusiasmo y el optimismo. También disminuye el estrés mental y aumenta la sensación de bienestar por la liberación de endorfinas. Por otra parte, se comprobó que la actividad física a través del baile de tango, por sus connotaciones psicosociales y emocionales, colabora en el mantenimiento de una vida sexual plena.

"En el ejercicio, se liberan compuestos químicos del cerebro, responsables de la sensación de bienestar: las beta endorfinas, sustancias del propio organismo. El aumento de estas sustancias en el cerebro, se producen con tan sólo 20 minutos de ejercicio aeróbico y sus efectos benéficos pueden llegar a durar mucho tiempo después", aclaró Comasco. Para el experto, la actividad física disminuye el grado de agresividad, ira, ansiedad, angustia y depresión. También estimula el manejo positivo de la autoestima y posibilita una mejor predisposición a la integración social.

UNA DANZA QUE ESTILIZA EL CUERPO, SERENA LA MENTE Y ALEGRA EL CORAZÓN